REFLEXIONES
PARA UNA ALQUIMIA ESPIRITUAL
Acordarse
de dos cosas
A lo largo de nuestra vida nos
encontramos con personas que aparentemente creen estar evolucionando
espiritualmente y más aun creen estar haciendo lo correcto: practican oración,
van a todos los eventos religiosos, etc. creyendo firmemente estar en lo
correcto; pero aun así, no logran encontrar la paz interior; la misma, que es considerada
señal de evolución espiritual; y encima de ello, se sienten defraudados porque con
todo lo que hacen Dios no los escucha por tal o cual motivo, y no les hace
caso, para ellos Dios los ha mandado a la tierra a sufrir, porque son buenos, esto
evidentemente nos indica que no hay una buena conexión con el Creador.
Antiguamente algunos grupos religiosos como los Esenios, para permitir ingresar a su congregación, hacían que cada uno de sus posibles miembros practicaran antes de ingresar durante un año, el amor a Dios sobre todas las cosas y el amor al prójimo como a uno mismo, de tal manera que dicho concepto se enraizara en la mente del posible miembro, y estos mandamientos se hicieran carne en ellos- este hecho se obtenía con la práctica mental y material permanente- lo mencionado anteriormente lo planteaban en sus libros y escritos, porque para ellos este era el primer paso, la base para comenzar el camino de la evolución espiritual, además de esto conseguían que la congregación se convirtiera en una gran hermandad, donde no existían discordias, envidias, egoísmos entre sus miembros de tal manera que el más evolucionado era el que más se preocupaba por el avance de los otros hermanos.
Antiguamente algunos grupos religiosos como los Esenios, para permitir ingresar a su congregación, hacían que cada uno de sus posibles miembros practicaran antes de ingresar durante un año, el amor a Dios sobre todas las cosas y el amor al prójimo como a uno mismo, de tal manera que dicho concepto se enraizara en la mente del posible miembro, y estos mandamientos se hicieran carne en ellos- este hecho se obtenía con la práctica mental y material permanente- lo mencionado anteriormente lo planteaban en sus libros y escritos, porque para ellos este era el primer paso, la base para comenzar el camino de la evolución espiritual, además de esto conseguían que la congregación se convirtiera en una gran hermandad, donde no existían discordias, envidias, egoísmos entre sus miembros de tal manera que el más evolucionado era el que más se preocupaba por el avance de los otros hermanos.
Del análisis y búsqueda de la
verdad nos atrevemos a decir que para comenzar nuestra evolución espiritual,
necesitamos empezar a practicar permanentemente estos dos mandamientos pues son
la base del amor, expresión máxima de Dios, y la única manera para hacer morar
la paz en nuestro cuerpo (templo). Es tal la importancia de estos mandamientos
que no hay espiritualidad que valga, sino es expresión del cumplimiento de
estos.