REFLEXIONES
PARA UNA ALQUIMIA ESPIRITUAL
Fanatismo:
Ceguera mental
El exaltar nuestro sentimiento
religioso o ideológico, nos conduce a la ceguera mental y por lo tanto no
podemos apreciar las otras corrientes de pensamiento, lo mismo que nos lleva a
ser etiquetados como: fanáticos; de tal manera, que creemos estar siempre en la
verdad, aún así estemos sentados sobre una mentira.
Las sociedades o personas que
llegan a una madurez, son capaces de poder convivir con personas que tienen
doctrinas o postulados diferentes a las de ellos, intercambiando conceptos e
ideas y alimentándose unos a otros de los pensamientos positivos que puedan de
sus interacciones sociales.
El fanatismo es un comportamiento
nocivo para los seres humanos, porque no nos permite evolucionar, al negarnos
la posibilidad de aprender y comprender a las otras personas- y sobretodo-
porque pensamos que somos los únicos poseedores de la verdad, lo cual es totalmente
falso, porque si estuviéramos sentados sobre la verdad, nuestro pensamiento
seria más amplio e integral y podríamos interactuar con todos los otros seres
humanos, tal como lo hiciera nuestro Maestro Jesucristo, al comprender e
interactuar con los que pensaban diferente a él, para poder enseñarles y
orientarlos .